Es ante la suba del uso de vehículos particulares, sobre todo automóviles. La Secretaría de Transporte y Obras de la Ciudad realizó un relevamiento donde se observó un crecimiento en los viajes realizados en autos personales; fue del 22% en 2019 al 36% en 2020.
Las autoridades porteñas buscan frenar el uso de autos particulares ante la preocupación por el marcado crecimiento que tuvo en 2020 este método de movilidad, que podría generar futuros congestionamientos de tránsito, y propondrá la utilización de la bicicleta y el retorno a los medios de transporte públicos.
El año pasado hubo menos movimiento de personas pero lo que demuestra el informe es el cambio de movilidad de muchos habitantes de la ciudad. El informe fue elaborado por la Secretaría de Transporte y Obras de la Ciudad para analizar la forma en que se movilizaron las personas durante el año pasado, el que mostró una suba en los viajes realizados en autos particulares con origen y destino dentro del distrito porteño que fue del 22% en 2019 al 36% en 2020.
Analizando estos datos, Lucila Capelli, subsecretaria de Planificación de la Movilidad porteña comentó: «Hay un cambio en los patrones de viajes para la pospandemia, y por eso tenemos que poner el foco en que la gente vuelva al transporte público porque se perdieron entre un millón y un millón y medio de pasajeros en 2020″.
El relevamiento, difundido por la gestión porteña a la prensa, indicó que durante las etapas de Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio y de Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio la cantidad de movimientos dentro de la Ciudad se redujo a la mitad.
Entre los medios principales, que bajaron la cantidad de traslados, se destaca el transporte público, entre ellos los colectivos, los trenes y subtes, dado que su uso fue exclusivo para los trabajadores esenciales, no obstante la restricción quedó esta semana sin vigencia y se abrió su utilización a todo tipo de pasajeros.
Mientras que en la pre pandemia, el transporte público representaba el 50% del total de viajes, en contraposición en el 2020 disminuyó al 29%; en tanto que en la última semana los colectivos registraron el 73%, el subte 33% y los trenes poco más de la mitad, un 53%.
Por su parte, Juan José Mendez, secretario de Transporte y Obras Públicas porteño, evalúa la situación con una razón de perfil psicológica «Uno de los desafíos de cara a la salida de la pandemia es recuperar la confianza en el transporte público», y aseguró que ese momento será «cuando sea seguro y con los protocolos correspondientes».
A su vez, para los funcionarios porteños, el regreso al transporte público es la respuesta sobre la cual se apoyan en torno a la problemática de un tránsito colapsado que podría ocurrir frente al ascenso en la cantidad de viajes en automóviles particulares. Para comenzar la desactivación, una de las primeras resoluciones que tomaron, a partir del 2 de agosto pasado, que fue el primer día hábil luego de las vacaciones de invierno, fue que volvieron las reglas habituales de estacionamiento que incluyó el regreso de las multas y el acarreo de autos.
«Hay muchas razones para desalentar al uso de los autos, entre ellas, los costos del combustible, del peaje y del estacionamiento, así como también la propia congestión del tránsito», dijo Mendez
En la misma línea, el jefe de Gabinete porteño dijo que: “El futuro de la Ciudad en términos de movilidad es en bicicleta. Es lo que la gente nos viene demostrando cada vez más y una de las principales enseñanzas de esta pandemia. Además, es una manera de ir mutando hacía una movilidad más sustentable», sostuvo, en tanto, Felipe Miguel, jefe de Gabinete porteño.
El uso de la bicicleta, según los estudios que realizó la CABA, subió durante la pandemia de 320 mil viajes diarios en 2019 a 405 mil viajes diarios en 2020. Y para esto se trabaja en mejorar la red de ciclovías, que alcanza los 267 kilómetros, comunicando que habrá nuevas intervenciones en más avenidas.
